viernes, 3 de junio de 2011

Cuestión de Identidad

Aprendí a leer con algo más de tres años.

Fui muy precoz en eso. Mi hermano, un año mayor que yo, estaba aprendiendo con cuatro años y en aquella época yo le profesaba tal admiración que me fijaba en todo lo que hacía. Así que aprendí a leer viéndole a él. Cuando las profesoras y las monjas de la guardería se dieron cuenta de que con algo más de tres años yo ya leía le echaron la bronca a mi madre. La niña leía y lo que no hacía era dormir.

Cada tarde nos montaban unos colchones para dormir la siesta y yo me pasaba el rato dando vueltas. No recuerdo si daba guerra, supongo que si, Apenas hablaba con alguien que no fuera de mi familia así que no sé qué clase de guerra daba. La monja que nos cuidaba se hartaba de mí, me llevaba a otra sala, me regañaba y me amenazaba con hombres del saco, coqueros y todo tipo de personajes masculinos horrendos. Pero daba igual, yo seguía sin dormir. Así que decidieron aprovechar mi capacidad de aprendizaje y me tenían la hora de la siesta leyendo cuentos. 

En las Navidades del 78, con los seis años cumplidos en agosto, los Reyes Magos me trajeron una versión algo reducida y edulcorada del libro de Mujercitas. Por la noche, antes de intentar que me durmiera, me dejaban leer un poco. Cuando terminé de leerlo quise comenzar de nuevo. Creo que mis padres nunca supieron por qué sentía tanta pasión por aquel libro.

Podéis imaginar que el personaje que me atrapó fue el de Jo. Recuerdo quedarme mirando la portada del libro, en la que aparecía una ilustración de una chica sonriente con el pelo corto acompañada de sus tres hermanas muy señoritas. Aquella ilustración me enseñó que era posible ser chica, llevar el pelo corto y ser feliz. También me encantaba la idea de que la incansable escritora de historias hubiese acortado su nombre. Fue entonces cuando yo decidí que sería Chris.

Ese no es el nombre que aparece en mi carnet de identidad. De hecho, el oficial es compuesto y nunca me he sentido identificada con ninguno de los dos. Con seis años escogí mi nombre, con el que quería que me llamaran. A los 11 comencé a firmar con él. Y aunque me costó muchos años entender y verbalizar la motivación de mi decisión, sabía que tenía que ver con mi identidad.

El nombre por el que me llamaban en el colegio, en mi casa, mi familia...era el de un personaje que se habían inventado ellos. Alguien a quien habían dotado de unos rasgos físicos determinados, de una personalidad concreta y a la que le habían asignado un lugar y una posición tanto dentro de la familia como en la vida.

Desde muy joven me rebelé contra esas ideas. No, yo no era la niña de melena castaña, de buenos modales, con vestidos de flores y verdugo azul marino. No era la comparsa de mi prima, que me llevaba 11 meses y 12 días, no era a la que obligaban a disfrazarse en las fiestas y a bailar con faldita y lazo en la cabeza.



Era y soy Chris. Con mis particularidades físicas, mi pelo corto, mi supuesta androginia, la ropa holgada, los vaqueros y las zapatillas de Converse. Soy Chris, tímida por naturaleza pero dicharachera en la intimidad. Soy Chris, la bollo, la cariñosa, la detallista, la borde y sarcástica, la amante de la naturaleza...

Soy Chris, de las pocas bolloblogueras junto con Lena que no utilizo un nick para identificarme. Es el nombre que me identifica , la persona que soy y no la que siempre han querido los demás que fuera.

Me comentaba hoy una bloguera que ha cambiado su blog por motivos de fuerza mayor, que no se siente identificada con su “nueva personalidad” Y es que creo que el nombre es parte de nuestra identidad. Nos forma, nos resume, nos dota de nuestra esencia... No os ha ocurrido nunca que habéis conocido a alguien y al presentarse habéis pensado que no le pega nada el nombre?

Curiosamente, algo que nos define de tal modo, nos viene impuesto. Muchas veces se corresponde con la ilusión de nuestros padres que nos han imaginado aún antes de nacer. En el caso de las adopciones resulta aún más extraño. Si vienen de paises donde no se habla español es casi seguro el cambio de nombre. ¿Alguna vez nos hemos planteado que sienten los niños adoptados con más de tres años, cuando no sólo cambian la cultura sino que además se ven obligados a adoptar una nueva identidad?

Y todo este rollo....para contaros que una marca de bebida isotónica va a cambiar de nombre. Y han lanzado una campaña publicitaria en la que te animan a que contactes con ellos si quieres cambiar tu nombre.

Llevo años queriendo cambiarlo, así que entré en la “promoción” rellené el formulario, solicité los certificados que necesitaba, hablé con los testigos que me exigen para acreditar que llevo toda mi vida haciéndome llamar Chris...y me contestan hoy que mi cambio de nombre no es viable porque resulta intrascendente para la Dirección General del Registro y el Notariado.

Obviamente para ellos resulta intrascendente, pero cuando alguien solicita un cambio de nombre no creo que lo haga por mero capricho. Al menos para mí, resulta vital cerrar el círculo que inicié hace tanto tiempo y que me asignen el nombre con el que me identifico.

¿En qué país tan avanzado vivimos si te permiten cambiarte de sexo, pero no te dejan ponerte el nombre que quieres?  

13 comentarios:

  1. Si cumples esto deberían dejarte cambiarlo,informanos silo haces.Saludos y espero que por fin te dejen ser tu.
    REQUISITOS

    1.- Que se trate de obtener el equivalente onomástico en otra lengua española del nombre propio inscrito.

    2.- Que se pretenda la regularización ortográfica de apellidos para adecuarlos a la lengua española correspondiente.

    3.- Que se quiera anteponer la partícula "de" al primer apellido que sea normalmente nombre propio.

    4.- Que un mayor de edad solicite la inversión de sus apellidos.

    5.- Que se trate de cambiar el apellido "Expósito" o análogos; de cambiar nombres o apellidos impuestos con infracción de las normas establecidas; de conservar los apellidos anteriores a la inscripción de la filiación; de cambiar el nombre propio por el usado habitualmente o de obtener la traducción de un nombre propio extranjero o la adecuación gráfica a las lenguas españolas de un apellido extranjero.

    El cambio del nombre propio requiere:
    - Justa causa y que no haya perjuicio de tercero.

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  2. Chris, me quito el sombrero -que nunca llevo-. En cada post cuentas una historia completa, no migajas de una pequeña parte de una concreta realidad. A mí siempre me han llamado por el diminutivo de mi nombre. Quienes no lo hacen no eran parte de mi familia o amig@s. Eso ha cambiado porque nadie sabría llamarme de esa manera -ahora aquí- exótica. En cuanto a mi nick, es un chiste creado a propósito. Buen post.

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  3. Ah, lo olvidaba. Vaya brujas las monjas que te "educaban". Asustar a la infancia era su gran cometido.

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  4. Debe ser cierto eso de la identidad...No me identifico ni con mi nombre ni con mi(s) nik(s)
    Pero he aprendido a vivir con ellos, así soy como me da la gana y puedo cambiar a mi antojo. (nunca me gustó lo demasiado estático)

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  5. Los nicks no son siempre para esconderse, yo lo llevo por tema un poco sentimental, y porque me gusta, vaya.
    Es cierto lo que dice Juli Gan, tus post son historias muy completas, excepto la del salto de la tigresa que fue completisssima jajaja!!

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  6. es interesante, nunca he conocido a nadie que no se identificase con su nombre hasta el punto de querer cambiarlo por otro, o hacerse llamar de otro modo.
    a mi los nombres no me importan mucho, aunque el mio me gusta, pero con estar segura de quien soy y lo que quiero me basta. y eso nunca me ha faltado.
    besos

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  7. Chris, cariño! en tu caso el nombre es lo de menos.
    Vaya si lo sabré yo!!! que con esa maravillosa magia que posees me llevas a tocar el cielo, no una sino hasta 3 veces sin poner un dedo sobre mi cuerpo.
    Tu esencia es más que tu nombre, eres una maravillosa mujer.
    Saludos desde el anonimato!

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  8. Antes que nada, debería de ser prohibido que las monjas eduquen, son una retrogradas.
    Imagino lo importante que debe de ser para ti lo del cambio de nombre, pienso que deberías de insistir, tal vez la próxima te atienda alguien mas gente.
    Me agrada mucho conocerte sin seudónimos o nick, porque desde un primer momento has sido para mi Chris, y si cambiases tu nombre por uno totalmente diferente, tu siempre serías Chris.
    De acuerdo con las chicas que comentaron arriba: tus post son muy buenos, y para no dejar de mencionar al o la anónima, coincido con el o ella, en qué eres una mujer maravillosa.
    Besos Chris... muchos besos!

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  9. Axli, lo que quiero cambiar es mi nombre de pila. Trato de mandarte un mail para explicarte mejor. Parece que controlas el tema Trabajas en el Registro?

    Juli...Las monjas...esa especie aparte...qué daño han hecho en la educación de algunas generaciones...

    Mada, la vetdad es que a mí tampoco me ha salido nunca llamarte por tu nombre. Tapetece un café de los nuestros esta semana?

    Hormiga, me parece genial que la gente utilice nicks por temas sentimentales o de seguridad. En mi caso es que soy incapaz de ponerme uno con el que me sienta realmente identificada. Gracias por lo de las historias completas. Espero no llegar a aburrir!!

    A punto...de eso se trata. Yo estoy segura de quien soy pero siempre han pretendido que fuera otra!

    Anónima...después de tocar el cielo eres capaz de decir cualquier cosa increible sobre mí jajaja!!! Gracias por la buena publicidad y que usted lo siga disfrutando!

    Maye, me pongo colorá!! Gracias por entenderme. Si me llamara Fuencisla me gustaría que me siguieras llamando Chris. Y de las monjas no me gustan...ni los cuadros!! :-P

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  10. He tenido una vida muy parecida a la tuya en cuanto a la temprana lectura y las monjas.
    Sin embargo no fui, o no recuerdo, haber sido demasiado rebelde en cuanto a las "formas" pero era muy observadora y soltaba "inconveniencias", y aunque era una niña, más de un bofetón paterno me llevé por lo que yo creia era sinceridad y los adultos mala educación por decir aquello que pensabas... Ahora me doy cuenta, escribiendo esto, que he sido siempre una rebelde pasiva, es decir que me callaba y al final hacia lo que me daba la gana. Soy poco peleona.
    En cuanto a los nicks, cuando empezamos la web S. era "la una" y yo "la otra". Pronto me cansé y ahora firmo como Isa o Isabel, que es mi verdadero nombre, nunca encontré un nick que me gustara o definiera o no me pareciera demasiado trágico, así que me quedé con mi nombre

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  11. Creo que hemos pasado todas por "Mujercitas" y su impronta. Entiendo tu cabreo; de la profe monja no puedo decir nada bonito, salvo sus sílabas invertidas. Por favor, para cuándo separación de religión y educación?. Y te diré que este nick ha sido mi nombre real hace como 36años...jajaja

    Besos.Lenteja

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  12. ¿INTRASCENDENTE para la Dirección General del Registro y el Notariado? Pero si la que quiere cambiar el nombre de pila eres tú, digo yo que quien debe valorar si es o no intrascendente eres tú. Ellos limitarse a comprobar si el cambio es o no legal. Ya nos contarás en qué acaba.

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  13. Isa, creo que los adultos son incapaces de soportar la honestidad de los niños.

    Amiga Lenteja...siempre te han llamado así? La verdad es que te identifico plenamente con ese nick Jaja!!

    Patsy...no lo has podido definir mejor...

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